Seguridad y valor de
marca
¿Qué compra la gente cuando compra Seguridad?
Por Edgardo
Frigo
¿Usted nunca ha comprado un bolígrafo? Supongo que sí: salió de su oficina,
fue a la librería y dijo al empleado: "quiero un bolígrafo". El empleado
señaló un exhibidor y le dijo "Aquí están: elija una".
Ahí comenzaron sus
problemas.
¿Que vio Usted? Usted vio cientos de bolígrafos de
distintos formatos, modelos, colores y precios.
Estos bolígrafos comparten una característica: todos escriben EXACTAMENTE
IGUAL, o la diferencia en el trazo es tan pequeña que solo puede
distinguirlas un especialista. También comparten otra característica: todas
se venden. Todas tienen demanda. Pero un bolígrafo Bic costaba cincuenta
centavos, uno marca Pilot costaba cinco pesos, otro de Parker costaba
cincuenta, y un Mont Blanc costaba quinientos pesos: MIL veces más que el
Bic!.
Este ejemplo nos trae preguntas clave:
1. Seguramente alguna vez Usted compró un bolígrafo Pilot, Parker o Mont
Blanc. Podía haber comprado un Bic. ¿Porqué Usted cree que ese bolígrafo
valía el precio que pagó por el?
2. Cualquiera puede comprar un producto (el bolígrafo) o un servicio (la
escritura que produce el bolígrafo) a cincuenta centavos. Entonces, ¿porqué
alguien decide pagar diez, cien o mil por algo que puede comprar a uno?
3. En los mercados actuales hay muchas empresas de Seguridad con precios y
servicios muy similares. Entonces... ¿a qué bolígrafo puede compararse el
servicio que Usted vende ? ¿Es Parker? ¿Mont Blanc? ¿O ni siguiera llega a
ser Bic? (Le recuerdo que el humilde bolígrafo Bic, pese a ser el más barato
de su mercado, siempre escribe bien.)
4. Hay muchos compradores potenciales para el servicio de Seguridad que
vende su empresa. Ellos tienen el mismo problema que Usted con el bolígrafo:
deben elegir entre muchas empresas similares que ofrecen servicios que
parecen casi idénticos. Entonces ¿cómo va Usted a ayudarlos a tomar una
decisión adecuada? ¿Y adecuada para quien?
5. Quizá a Usted le gustaría vender su servicio un poco más caro. Pero el
servicio que Usted ofrece: ¿Vale un poco más? ¿Para quien? ¿Porqué?
Vamos a enfocarnos en la primera pregunta: que compra la gente cuando
compra, la relación entre el valor y el precio de un servicio, y las formas
de agregar valor a nuestro servicio.
EL NUEVO PANORAMA
El panorama de las empresas de servicios se ha vuelto más complejo,
cambiante y competitivo. Mantener satisfechos a los clientes se ha vuelto
más difícil: cada vez demandan más y cada vez quieren pagar menos, y todas
las semanas aparecen empresas competidoras que buscan quedarse con nuestros
Clientes.
En este medio nuevo y más exigente, tener un amigo bien ubicado ya no nos
garantiza nuevos negocios... y ni siquiera nos garantiza poder mantener los
negocios actuales. Para competir en estos nuevos mercados necesitamos
incorporar a la empresa nuevas habilidades que antes no hacían falta. Y para
saber qué nos falta, es útil comprender en que mercado estamos trabajando.
CLASES DE MERCADOS
Como dice Alberto Wilensky, las empresas de servicios pueden competir en
tres clases de mercados:
1. Mercados perfectamente competitivos como el de los quioscos:
Hay muchos vendedores del mismo producto, los compradores conocen calidades
y precios, y prácticamente no hay barreras al ingreso de nuevos
competidores. Cualquiera puede poner otro quiosco. En estos mercados todos
los competidores deben cobrar precios muy similares, ya que nadie va a pagar
más por el mismo producto. Estos negocios tienen baja rentabilidad, porque
en general el número de kioscos es alto respecto de la demanda.
2. Mercados monopólicos, en los que una sola empresa controla todo el
negocio:
Tienen barreras muy altas de tecnología o capital para el ingreso de otros
competidores. Por ejemplo, en Latinoamérica la empresa Siderca es la única
en el mercado de producción de tubos de acero sin costura para la industria
petrolera. Para competir con ella, habría que invertir 1,500 millones de
dólares en una planta de fabricación. Esta barrera de capital en la práctica
es infranqueable, y asegura altas ganancias para Siderca.
3. Entre ambos extremos se ubican los mercados de competencia imperfecta, o
de competencia monopólica.
En estos mercados hay muchos competidores y las barreras de ingreso al
negocio no son muy altas. Pese a que los productos o servicios son similares
entre sí, como ocurre en cigarrillos, desodorantes o empresas de seguridad,
cada productor intenta diferenciar su producto, buscando monopolizar las
preferencias de ciertos Clientes. Entonces hay muchas empresas rivales, pero
cada una busca monopolizar un segmento del mercado para obtener mayores
ganancias.
Este es el verdadero negocio. Nadie compite por competir. Se compite por
ganar, o sea por monopolizar un mercado, un segmento, un nicho, un tipo
especial de clientes o de servicio. La eficiencia económica nace de la
competencia de muchos, cada uno de los cuales intenta ser monopólico y
apropiarse de todo el mercado.
NUESTRO NEGOCIO
Podemos analizar el mercado de Seguridad teniendo en cuenta lo que ya
dijimos: las empresas de servicios generalmente trabajan en mercados de
competencia imperfecta, en los que cada empresa trata de diferenciarse y
aventajar a las demás para ganar rentabilidad.
No profundizaremos en los mercados monopólicos. Los servicios públicos
monopólicos, por ejemplo, no necesitan estrategia para "vendernos" servicio
telefónico. Somos Clientes cautivos, y debemos aceptar los servicios que
quieran brindarnos, y el precio que quieran cobrarnos. Las barreras de
ingreso, en este caso de orden legal, son infranqueables para sus
competidores, lo que asegura altas ganancias a esas empresas públicas... o
se las aseguraría su estuvieran bien gerenciadas.
Tampoco nos vamos a enfocar en los mercados completamente competitivos. Si
en nuestra calle se instalaron seis quioscos, podemos usar muchas
herramientas competitivas, pero lo mejor que podemos hacer es irnos un poco
más lejos para tratar de ser "un poco más monopólicos". Lo mismo pasa para
las empresas que venden servicios indiferenciados: compiten solamente por
precio. Pero volviendo al ejemplo de los quioscos, ya no tienen "otra calle"
adonde ir.
LA CONSTRUCCIÓN DE MARCA
El Cliente analiza cada servicio en términos de ventaja para él. Necesita
sentir que su compra ha sido racional. Si no puede justificar su compra, no
la hará o no la repetirá.
En este proceso, el PRECIO debe presentarse como parte de una transacción
favorable. Cuando ese Cliente va a comprar un bolígrafo Parker, el precio
del producto está compuesto por el precio del genérico (cualquier bolígrafo)
más el valor de la marca Parker.
Si la marca no vale nada, el Cliente comprará el bolígrafo más barato. Lo
mismo pasa con los servicios de Seguridad.
Cuando hemos invertido en agregar valor a nuestra marca podemos cobrar un
poco más. Mientras más fuerte sea nuestro posicionamiento mayor diferencia
de precio podremos cobrar por sobre las empresas cuyo nombre no significa
nada. Aquí está el negocio. Pero pocas empresas del sector de la seguridad
han trabajado en construir su marca. La construcción de la marca es mucho
más que hacer propaganda o cambiar de folleto. Se trata de construir valor,
desde el punto de vista del cliente.
EN SÍNTESIS
En mercados tan competitivos como el de la seguridad
privada, crear una marca es la única posibilidad de obtener mayor margen de
ganancia, lo que se consigue si el Cliente perciba que está obteniendo más
valor por su dinero. Como siente que recibe más valor, estará dispuesto a
pagar más. De otro modo, siempre comprará lo mas barato.
La palabra clave es PERCEPCIÓN. No solo debemos agregar más valor al
servicio que damos a nuestros distintos Clientes. Ellos deben percibirlo. De
otro modo, no demandarán nuestro servicio, o no estarán dispuestos a pagar
más por él.
El autor de este artículo, Prof. Edgardo Frigo,
es consultor especialista en management de Seguridad, experto en capacitación y director de este Foro
Profesional.
Vea sus antecedentes en https://www.forodeseguridad.com/frigo.htm
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